Antes de ayer leí un artículo en Linkedin de Inés Díaz, que es copywriter, donde hablaba de en qué se debería fijar una empresa a la hora de contratar un copywriter.
¿Mi nota al artículo?
Un 10.
Cada punto, cada coma, lo suscribo.
A tan excelente reflexión solo me queda añadir un pequeño detalle.
Esto va por todas aquellas personas que están pensando contratar un copywriter profesional…
Tenéis que hacer esta prueba.
Es muy fácil.
Si cuando vayáis a contratar un copywriter le pedís un portafolio de sus trabajos y te lo da en vez de mandarte a dar un paseo, pues entonces no le debes contratar.
El que es bueno no te va a dar ninguna muestra, ya tiene su web y suficiente trabajo como para aguantar cansinos.
Es lo que hay.
ves a alguien muy bueno haciendo algo que tú necesitas, ¿para qué coño quieres ver un portafolio?
Te puede presentar a su cuñado o a su primo o a su amante. ¿No sabes juzgar por ti mismo?
No es un microondas del que necesites ver la valoración en Amazon. Es un copywriter, ¿no sabes leer?
Y si su web no te dice nada, pues no sé para qué quieres una muestra.
Y si te dice mucho, tampoco sé para que la quieres.
Esto es así de simple.
¿Y qué hacer si eres un copywriter novato?
Pues escribir una carta de ventas de la que alguien con dos dedos de frente diga, yo quiero que esta persona escriba mi página de ventas.
¿Y si el que lee no tiene dos dedos de frente?
Pues entonces que escriba él. Trabajar con gente que no sabe lo que quiere es terrible.
¿Una buena noticia?
Ser copywriter es una profesión muy sencilla.
Solo necesitas una web con fondo blanco y un texto en negro. A veces, ni web.
A ver, no estamos hablando de un copywriter para formarte, uno puede ser bueno vendiendo y ser un inútil enseñando, conozco a unos cuantos, pero si lo quieres para que venda tus cosas, pues ya está.
Bueno, tengo una carta de ventas nueva. La saqué hace tres o cuatro días.
Vendo una conversación privada.
Puedes entrar y ver si te gusta y pensar si venderá o no venderá.
Creo que esta tiene menos faltas de ortografía que otras que escribo pero tampoco lo sé.
Privada:
Isra Bravo
