Una día de San Patricio, cuando trabajaba en Irlanda, salimos un grupo de españoles por el mundo a tomar unas pintas.
Por Limerick.
Limerick es una ciudad tan fea que Parla parece Praga a su lado.
Es fea y peligrosa.
Y nos fuimos a la parte más fea y más peligrosa de toda la ciudad.
El barrio de la cárcel.
Oh
Allí viví algunas cosas que el filtro de spam no me dejaría poner sin mandar el mail a la basura.
Bien.
El caso es que fuimos para un pub y en la puerta había un gorila con pinta de no saber ni rellenar una plantilla, que nos dijo:
-Os aconsejo que no entréis, la gente está muy bebida y los extranjeros no son bienvenidos. A mí me da igual, pero si entráis es posible que tengáis problemas. No es vuestro sitio.
Lógicamente, como yo soy un cobarde (o con imaginación, como diría el gran Charles Bukowski) le dije:
-Ok, mejor nos vamos.
Pero uno de los españoles por el mundo, que era valiente, dijo:
-Yo entro.
Y entró. Solo. Los demás nos fuimos a celebrar San Patricio a mi apartamento.
Al español por el mundo valiente, no le volvimos a ver. Se rumoreó que le dieron una paliza y lo lanzaron al río.
Nunca lo supimos.
Esta historia, 100% verdadera, (el tipo no volvió a su casa, dejando pertenencias, y un año después que me largué de allí no había aparecido) tiene una cosa que puedes aprovechar para vender online.
¿Qué cosa?
A partir de la página 27 de Copywriting para atrevidos y hasta la página 45, te digo, exactamente, cómo debes realizar una profunda investigación de tu mercado y de tus potenciales clientes.
Seguramente no te valga para encontrar al español por el mundo desaparecido en Irlanda, pero ¿a quién le importa?
Ahora, investigar para conocer a tu cliente, lo que quiere, lo que le duele, lo que busca, lo que desea y cómo saber en qué sitios debes meterte y en cuáles no….
Lo mismo sí es importante para ti y tu negocio:
Isra Bravo