Hace unos meses, una persona humana de la tierra que se está formando conmigo, me mandó un email.
Un email en el que me atribuía a mí, parte del mérito por las buenas críticas que estaba recibiendo su libro.
Por la manera en que estaba escrito.
Lo primero de todo, es que el mérito es exclusivamente suyo.
De su implementación, perseverancia y ganas de avanzar.
Lo segundo, es que una de las preguntas que me hizo en su momento, fue cómo podemos escribir para sonar más natural, como en una conversación.
A ver…
Esto, que parece (y es) tan primordial, pasa desapercibido para la mayoría.
¿La razón?
Pues mira, no lo sé. Supongo que están más pendientes de caer bien que de vender.
Allá cada cual.
Bien.
La respuesta que le di a Vicente, que así se llama el autor del libro, es válida para todo.
Me refiero que no es solo importante para escribir el libro, es importante para luego venderlo.
Para escribirlo.
Y para luego, venderlo.
Escribir.
Vender.
Ya sabes.
Escribir mola, luego venderlo mola todavía más.
En fin, en la formación de diciembre, te cuento tres cosas con respecto a esto.
La primera, quién es esta persona.
La segunda, cómo se llama su obra.
Y la tercera y más importante para ti, cual es el ejercicio más eficaz para mejorar tu copywriting conversacional.
Eso te será muy útil para escribir emails, cartas de venta, anuncios…
en fin, lo que quieras. Vas a mejorar toda tu comunicación y con ello, vas a mejorar tus ventas.
Casi, casi, seguro.
¿Requisitos?
Hombre, pues sí. Algunos hay.
No sirve conversar con una pared.
Si lo que vendes no le interesa a nadie, pues yo milagros no hago.
Si tú los haces me avisas que no quiero engordar en Navidad.
Bueno, si vendes algo que le interesa a otros seres humanos de la tierra, aquí te voy a explicar un ejercicio muy interesante para hacer eso mucho mejor.
Isra Bravo