Esto que te voy a contar es lo que está pasando en los negocios online.
Hoy. Justo en este momento.
Mira.
Hace un buen puñado de años, en un pueblo donde vivía con mis padres, se organizaba todos los años, en septiembre, una paella gigante.
Para 5000 personas.
Por las fiestas del pueblo.
Mucha gente, que esa misma mañana había desayunado dos veces, hacía colas de más de dos horas…
(no es broma, dos horas largas)
…para que le dieran un poco de paella en un plato de plástico y comérselo de pie.
Las personas que sabían deletrear su propio nombre miraban la escena con una mezcla de pena y risas.
¿Cómo era posible que gente que come 5 veces al día y tiene un techo, se arremoline alrededor de un poco de arroz esperando más de dos horas de pie?
¿La conclusión más probable?
Son idiotas perdidos.
Creo, sinceramente, que alguien que hace tres horas de cola para comer un poco gratis, cuando tiene la despensa llena, es idiota perdido sin ningún género de dudas.
Bien.
Pues antes de Internet, esa gente no montaba negocio online.
Ahora, sí.
Internet mola mucho porque cualquiera puede montar un negocio, hasta los de la paella.
Unas gafas de sol, unas palmas, un gritar que “tu misión es cambiar la vida de millones de personas” y que pase el siguiente rebaño.
Es lo que hay.
Repito
Es lo hay.
El nivel baja. No sube. Baja.
Bueno.
En mi curso de cartas de venta no damos palmas.
Tampoco te regalo gafas de sol.
Ni tengo una página de facebook con un montón de tutores que descubrieron el copywriting el mes pasado.
En serio.
A mí, mi madre me decía de pequeño que reírse de la gente estaba muy mal. Y un día me pasé de listo y me lanzó una zapatilla a la cabeza.
Como debe ser.
Bueno, si has entendido este email, es posible que este curso te interese.
Isra Bravo