Hoy recibí un regalo de la psicóloga Marina Díaz.
Marina es clienta y además de una bonita nota, me regaló un libro muy interesante.
Mucho.
Se titula El patrón bitc oin, de Saifedean Ammoous
(He tenido que mirar 7 veces el libro para apuntar bien el nombre y lo mismo no ha sido suficiente y tendría que mirar otras 7).
Solo he tenido tiempo de ojearlo por encima.
Pero hay un detalle muy importante para la venta.
Habrá mucho más, pero te cuento uno.
Dice así:
“En el mercado libre con dinero estable, los propietarios de capital escogen asignar su capital a las inversiones que consideran más productivas.
El método recompensa a las empresas que prestan un mejor servicio a sus clientes.
En un sistema de dinero fiduciario, sin embargo, el banco central es, de facto, responsable de la totalidad del proceso de asignación del crédito.
En el mundo del dinero fiduciario, tener acceso a las espitas del dinero del banco central es más importante que servir a los clientes.
Las empresas que pueden conseguir crédito a un tipo de interés bajo para operar tendrán una ventaja constante sobre los competidores que no pueden.
Los criterios para triunfar en el mercado están cada vez más relacionados con poder garantizar la financiación a tipos de interés más bajos que a prestar servicios a la sociedad”.
Bien.
La lección está muy clara.
¿Tu negocio tiene poder para negociar tipos de interés que rompan el mercado?
Seguramente, no.
¿Poder de negociación con bancos centrales, gobiernos, sindicatos?
Probablemente, tampoco.
Entonces, ¿competimos como el gigante o competimos como nosotros y ya veremos lo que crecemos?
¿Miro a la multinacional o miro al cliente potencial?
¿Somos el “como el Net flix de lo que sea que vendamos” o nos esforzamos?
La respuesta es muy clara.
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Isra Bravo